20 octubre, 2009

3er. travesia por el Uruguay- De Concordia al Palmar -8 al 12/11/07



Tercer travesìa en Piragua por el Rio Uruguay
Del 8 al 12 de Noviembre 2007.

El grupo de aventureros que años tras año nos juntamos para cumplir el rito de las travesías en piragua, tenìamos previsto reunirnos en la casa de Horacio Curti, ( pegadito al Fuerte de Barragán, lugar de partida) a las 11,00 hs. Este Jueves se habìa presentado, gris, hùmedo y caluroso. Previamente tenìamos preparado el trailer con las correspondientes canoas, sòlo hacìa falta que a medida de que lleguen los compañeros se carguen todos lo elementos que nos acompañarìan en el recorrido.
Se trataba del viaje Nª 12 ( 9 por el Salado y el 3ro. Por el Uruguay). En este caso el itinerario serà desde la Ciudad de Concordia Km 334,6 (E.Rios) hasta el Parque Nacional El Palmar Km 267 (en la misma provincia).
Luego de esperar a los mas rezagados (Carlitos Salvo es campeòn en el rubro), los 14 expedicionarios, partimos en tres vehículos.
A poco andar descubrimos que la camioneta Renault Trafic (1.4) del amigo Turchi, no podìa sobrepasar el lìmite de los 80 Km/h (con viento de popa), esto sumado a algunos pequeños contratiempos originò que el viaje se extendiera mucho mas de la cuenta, llegando a Concordia a las 0,30 del Viernes 9.
Allì generosamente, nos brindò alojamiento la gente del Club de Regatas Concordia que se encuentra en un lindìsimo lugar, donde el rìo, se hace bien angosto de manera tal que la localidad uruguaya de Salto se encuentra a escasos 150 mts. El fin de semana, estaba previsto un encuentro de murgas, asì que tuvimos la suerte se escuchar los ensayos de una muy buena murga Uruguaya.
Armamos las colchonetas en un quincho y allí, descansamos hasta la mañana del viernes. Temprano, Fabián, Oscar y Pastilla se dirigieron a Prefectura, a cumplir con los tramites de rigor y luego de ello, nos aprestamos para zarpar hacia nuestro segundo destino, Puerto Yeruá, en el Km 305 aprox.
Salimos de Concordia, a las 10,50 hs. Con un día nublada pero calido, a medida que avanzábamos la amenaza de lluvia se hacia mas certera, y finalmente comenzó a llover en forma intermitente hasta que se hizo copiosa. En el Km 312, Facundo y Fabián se adelantaron a dar el parte al destacamento de P.N.A. de Puerto Yeruá. Y finalmente llegamos a un Camping municipal que estaba en gran parte inundado, acampando en una lomadita, pegado a un arroyo a las 13,15 hs. Inmediatamente buscamos leñas encendimos el fuego armamos una especie de toldería (para protegernos de la lluvia), desplegamos sobre las tablas convertidas en mesas la comida y la bebida (que no fue escasa por cierto) y nos engullimos unos buenos salamines, longanizas, mortadelas, quesos, maníes, picles, y las tartas y milongas que trajo cada uno desde su casa.
El acopio de leña y el fogón se hacían cada vez mas importantes, ya que esa noche era el turno de los costillares, vacíos y choris, que como no podía ser de otra manera, estuvieron a cargo del profe, Oscar Ponce de Leòn (un verdadero autodidacta en este metiè). La tarde transcurrió tranquila, la lluvia amaño y luego paro definitivamente. El arroyo se prestaba para la practica de la pesca y los expertos de este arte (Facu y Carlitos, aunque Carlitos pesca mejor con la gomera que con la caña) se dedicaron a procurarnos algunos pescados, que ni siquiera con trasmallo pudimos cazar.
La noche del Viernes trascurrió a puro asado, vino y de postre un rico habano que en numero de 3 había traído Papa Curti. De mas esta decir que Oscar le dejo al asado su sello. La fogata y la charla posteriores a la cena, se fueron acabando al ritmo de los mas cansados que en sus sillas se quedaban dormidos. La madrugada del Sábado 10, tuvo la tranquilidad de las noches sin viento, al principio y en un momento, el toldo parecía que se volaba al río, pero, ni siquiera los que durmieron a la intemperie tuvieron algún inconveniente. Ahora, el tiempo del mate, con tostadas , dulce y queso cuartirolo.
Esta nublado y la sensación es que va a continuar asì todo el día. Las presunciones de lo que pueda acontecer se suceden, que el viento en contra; que el sol no sale; va a hacer mas frío, mejor quedarnos …..en verdad todas cargadas de una elocuente decepción. Esperamos cambie, Inti asome y nos de justo en la jeta. Pese a los deseos de que aparezca el Dios de los Incas, no hubo caso seguía nublado. Lucas y Fabián fueron a sacar el trasmallo, apoyados por Carlitos y Darío de la otra costa. La cosecha fue flaquita, apenas una boguita y un sabalito. Desarmamos el campamento, apagamos el fogón y zarpamos con el cielo plomizo y viento del Este, Sudeste, hacia el tercer destino con la P.N.A. que nos iba a acompañar hasta que salgamos de su jurisdicción. Este tramo se hizo mas pesado que el anterior, debido a la inclemencia del viento que en ocasiones formaba olas importantes, sumado a la lluvia intermitente. A la hora de viaje, paramos sobre el Aº Yegua, a tomar un par de mates, teníamos justo enfrente la famosa meseta de Artigas, cuya altura es de 45 mts. Sobre el río y el monumento (construido sobre una base granítica) alcanza los 19 metros de altura, allí se puede apreciar, erguida y majestuosa la figura del gran patriota Oriental y Sudamericano.
Luego de navegar aprox. 2,30 hs., Pastilla y Fabián arrimaron a la costa para esperar al resto y comprobaron que detrás de unos mogotes y espinillos, se escondía un hermoso lugar con abundante leña, muy apto para el acampe. Nos encontrábamos en la localidad de Colonia Nueva Escocia, aprox. En el Km 290. Ahí decidimos quedarnos, así que desembarcamos los bártulos, armamos el campamento, calentamos el asado de la noche anterior, desplegamos la generosa bebida, con que regar el almuerzo y así fue transcurriendo el día. Por la tarde, los mas higiénicos procedieron a bañarse, en las limpias y templadas aguas del Río Uruguay (por lo menos por ahora, que no funciona Botnia).
A metros de nuestro acampe nos encontramos con tres lugareños de Nueva Escocia, que estaban de pesca en el lugar (dicho sea de paso) el campo era propiedad de la abuela de uno de ellos. Los invitamos al fogón, y se quedaron hasta bien entrada la noche disfrutando del Show de Turchi. Esa cena también fue de asado y papas fritas en el gran disco. O sea asado con fritas de restaurante. Los mas cansados y alcoholizados, se acostaron temprano, el resto se fue a contemplar la hermosa noche sobre el río, con la inconmensurable majestuosidad del cielo estrellado, que de a ratos deja caer una, para el deleite de los admiradores, que nos preguntamos hacia donde iràn, Es una de las coincidencias del grupo, a todos nos conmueven. El fuego, hizo el resto, el Mogote es una leña noble, y cada uno de nosotros fortaleció la discusión de los temas que surgían incansablemente. Hasta que, como quien no quiere la cosa, uno a uno se fueron acomodando en sus respectivas carpas o petates junto al fogón y debajo de un cielo azul, casi negro, que relumbra la incandescencia de millones de astros. A dormir … y la mañana del Domingo, 11, ¡¡¡ Que mañana!!! Derecho a donde acampamos (mirando bien al este), a las 5,35 exactamente, salió el sol, del lado de la costa Uruguaya, por detrás de los árboles y sin ninguna nube que entorpezca la visión del gran dios. Sin viento, no hay olas, el río se plancha y para la navegación de las canoas, es lo mejor que nos puede suceder. Y con el sol, ni escribir. A diferencia de la noche, fogón y mate. Desayuno y preparado de todos los vagayos para cargar y salir a nuestro ultimo punto del itinerario. Pero la impredecible naturaleza nos juega en contra, el viento, que había estado ausente se hace presente de la peor manera, (Este-sudeste), lo que genera
olas en dirección norte, justo encontra de nuestro derrotero. En principio no estaba tan bravo, así que decidimos ponerlo a consideración del grupo, cuando por mayoría habíamos decidido salir igual, (en menos de 20`) se puso más peligroso así que decidimos no correr riesgos innecesarios.
Se tiraron varias alternativas: a) esperar a ver si amainaba el viento, o terminar ahí y dirigirnos a buscar los vehículos a Concordia, esta ultima alternativa fue la que se impuso. Una verdadera pena ya que a las 15,00 hs aprox. Las condiciones del río nos hubieran permitido salir.
Algunos muchachos salieron a investigar como se encontraba el camino –desde la ruta provincial de canto rodado- hasta la vera del río (campamento), otros salieron a correr algunos Km para quemar algo de las cuantiosas calorías acumuladas.
Una vez chequeado el camino, la decisión era viajar a Concordia a buscar los vehículos, así que los conductores (Pastilla, Oscar I YII, y Darío) se fueron tipo 11,00 hs, el resto comenzamos a preparar el almuerzo para el mediodía del Domingo, siguiendo con el ritual –unos buenos fideos con estofado-.
Luego del infaltable Vermouth y el generoso almuerzo, quedo la tarde para el esparcimiento y escuchar los partidos (El Pincha 2 a 1 al Rojo y Boquita 4-0 a Velez, el Lobo ya había perdido con Racing). Dardo y el Negro, aprovechando que el río estaba navegable se fueron río arriba, hasta Colonia Nueva Escocia, a explorar la zona y coincidieron en apreciar lagunas, recodos y sitios verdaderamente bellos.
Cerca de las 16,00, llegaron los muchachos con los vehículos y luego acomodamos las canoas a fin de no demorar la partida el Lunes 12 por la mañana.
Por la tarde noche, luego de avivar el fogón, el amigo Pastilla Volpi, se lució (Ja, Ja, Ja) cocinando un exquisito arroz con calamares. Esa noche transcurrió similar a la anterior –sólo que mucho mas fresca- tal es así que los guapitos que duermen a la intemperie se fueron a las camionetas VIP.
La mañana del Lunes, se presento fría, pero muy soleada y despejada, el viento, que el día anterior nos juegò en contra, hoy soplaba suavemente del norte, e invitaba a cabalgarlo a bordo de las canoas, pero lamentablemente esto no podìa ser, ya que se nos acababa la travesía y tenìamos que comenzar a dejar el campamento, guardar todo y regresar a nuestros hogares.
Asì fue que lentamente fuimos abandonando el campamento, y no sin alguna dificultad menor, para salir esquivando espinillos y arbusto, fuimos llegando a la ruta provincial de ripio para posteriormente dirigirnos rumbo norte y luego sudoeste hasta empalmar (23 Km mediante) con la ruta 14 que nos condujo definitivamente a casa.
Asì dimos por terminada esta linda travesía con amigos aventureros y con la pequeña frustración de no poder terminar el itinerario trazado. Pero convencidos de que a la naturaleza hay que gozarla y no desafiarla, ella es siempre más savia y fuerte que el hombre. Y además te da revancha, por lo tanto el año que viene –quien sabe en que sitio- podremos disfrutarla a pleno compartiendo con amigos 4 días inolvidables.
Formaron parte del grupo: Curti, Walberto Horacio (il nono), González, Luis Dardo (el entrenado), Ponce de León, Oscar (el fatigado), Barrios, José Luis (el negro mudo), Volpi, pastilla (el desequilibrado hepático), Salvo, Carlos Romualdo (me quedo un ratito mas), Cabanellas, Amílcar (que rico habano),Mazzoni, Sergio “Chicota” (me siento muy descompuesto), Turchi, Oscar (el showman), Curti, Horacito (Zapata, si no la gana ….), Álvarez, Alejandro chirola (bla mas fuerte que no te escucho), Gonzalez, Darío (despegale el vaso de los dedos) o tambien denominado ¿Qué va a llevar señora?. Gonzalez, Lucas (suprimí los postres, que estas gordito), Ponce de León, Facundo (el pescador profesional, que no pesca un carajo).